La misión de la Iglesia de Dios Unida es proclamar a todo el mundo el verdadero mensaje del evangelio de Jesucristo: las buenas nuevas del venidero Reino de Dios. Es también preparar un pueblo para este Reino. Este mensaje no solo ofrece una gran esperanza a toda la humanidad, sino que también aborda el propósito de la existencia humana: por qué nacimos y hacia dónde se dirige nuestro mundo.